Hola, soy Rubén, un entusiasta de la historia peruana. Quiero compartir contigo la fascinante vida de un ilustre mestizo: Inca Garcilaso de la Vega. Nacido en la cuna de dos mundos, el 12 de abril de 1539, hijo de Sebastián Garcilaso de la Vega, un valiente capitán, y la noble ñusta Isabel Chimpu Ocllo, descendiente del eminente Inca Tupac Yupanqui. Bautizado como Gómez Suárez de Figueroa, desde niño mostró un especial interés por las crónicas familiares, especialmente aquellas narradas por su tío Cusí Huallpa.
En su infancia, vivió el levantamiento de Gonzalo Pizarro. Su padre, fiel a sus principios, evadió el conflicto, salvando a su familia de un destino aciago. Garcilaso, en su juventud, tuvo el honor de conocer a Sayri Tupac, el Inca de Vilcabamba, y se sumergió en las festividades ecuestres que celebraban su acercamiento a la corona española. Sin embargo, el joven Garcilaso vivió con pesar la separación de sus padres cuando su padre abandonó a Isabel por una dama española.
Con el deceso de su padre en 1559, Garcilaso partió hacia España, cumpliendo su última voluntad. Ya había forjado su intelecto con la latinidad y los principios cristianos de maestros españoles. Su travesía comenzó en el puerto de Callao, el 23 de enero de 1560, y finalmente, llegó a Córdoba, donde fue acogido por sus parientes, los marqueses de Priego, aunque su condición de hijo natural le causó cierta inquietud.
Inca Garcilaso luchó en las Alpujarras, aunque sus esfuerzos quedaron sin recompensa. Se retiró a Montilla, adoptando con orgullo el título de capitán. En Montilla, se entregó a la literatura y filosofía del renacimiento, y en 1589, dio a luz su traducción de los ‘Diálogos de amor’ de León el Hebreo. En esta obra, reflejaba su orgullo mestizo y su veneración por el Cusco, su ciudad natal.
Su magnum opus, Comentarios Reales, se reveló en Lisboa en 1609, un homenaje a su herencia y a la grandeza incaica. La segunda parte, la ‘Historia General del Perú’, vio la luz después de su muerte en 1617, redimiendo el honor de su linaje paterno. Garcilaso dejó este mundo el 22 de abril de 1616, en Córdoba, donde sus restos descansan en la Mezquita-Catedral.
Aspecto | Detalle |
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Fecha de Nacimiento | 12 de abril de 1539 |
Lugar de Descanso | Mezquita-Catedral de Córdoba |
Obras Principales | Comentarios Reales, Historia General del Perú |